Cuando Sony anunció hace unos meses su decisión por habilitar el cross-play con el resto de sistemas en aquellos títulos con un gran componente multijugador, no nos pudo alegrar más la noticia por el gran paso que suponía a la hora de eliminar las barreras para que los jugadores pudiesen jugar con sus amigos sin importar desde dónde se conectaran.
Fortnite fue el primer juego elegido para ello y poco después Psyonix avisó que lo mismo iba a suceder con Rocket League. Pues bien, ese momento acaba de llegar tras haberse hecho oficial que el título acaba de entrar en la beta del programa PlayStation Cross-Play, lo que permitirá a los usuarios de PS4 jugar con los de Nintendo Switch, Xbox One y Steam sin ningún problema.
A la hora de buscar partidas en cualquiera de los modos de juego, los compañeros o adversarios podrán pertenecer a cualquiera de los sistemas mencionados. Para asegurarse de que la función está activada, es necesario acceder al menú principal, al apartado de opciones y en la pestaña de Gameplay seleccionar Cross-Platform Play, no hay que hacer nada más.
Más adelante está previsto que se habiliten los grupos de amigos entre las diferentes plataformas, algo que llegará con una de las primeras actualizaciones que se publicarán en algún momento de este año. Hasta que llegue ese momento nos conformaremos con una de las funciones más demandadas desde hace muchísimo tiempo y que esperamos que se acabe implementando en más videojuegos.
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